Copenhagen, 29-3-2009, un 'triste' giro del destino y la obra maestra que pierde fuerza sin la armónica


Dylan y su banda cerraron con el concierto del domingo (29 de marzo) en el Forum de Copenhagen el tour por seis ciudades de los países escandinavos de Suecia, Noruega y Dinamarca, dentro de la gira europea 2009, para comenzar esta noche en el AWD Arena de Hannover los conciertos programados por Alemania en los escenarios de Berlín (1 de abril), Erfurt (2), Munich (4) y Saarbricken, el día 5. Dylan abandona Escandinavia sin haber presentado algunas de las canciones de su próximo álbum de estudio, Together Throught life, que saldrá a la venta el 28 de abril, y del que ya conocemos un avance con el tema Beyond here lies nothing, cuya descarga ofrece gratuitamente la página oficial de Dylan. Esta circunstancia posibilitará que Dylan interprete algo nuevo durante su ruta por las ciudades germanas. Fue el de Copenhagen, por otro lado, un concierto en la línea musical y escénica del resto ofrecido desde el principio de la gira. En esta ocasiòn, Dylan optó por abrir el concierto con el gospel Gotta Serve Somebody, del álbum Slow Train Coming (1979), un tema que no coge desprevenido a nadie tras su interpretación hace cuatro meses en Nueva York (el 21 de noviembre de 2008) e interpretado con escasas variaciones. Por lo tanto, lo destacable de este concierto fue la inclusión en el repertorio del espléndido tema Simple twist of fate (un simple giro del destino), del álbum antológico Blood on the tracks (1975), cuya interpretación, en mi opinión, se salva merced al sólo de armónica que Dylan ofrece al final del tema. Por su parte, When I paint my masterpiece (cuando pinte mi obra maestra) ha perdido algo de fuerza desde su primera interpretación en el Spektrum de Oslo, ya no es la armónica la que marca la pauta del ritmo, su ausencia resta emoción, encanto y poder. Estupenda, por cierto, Honest with me, cuya fama le precede y nunca defrauda. Es una canción poderosa que Dylan interpreta con brío e inventiva y de la que se puede decir, junto con High water -que en esta ocasión no fue incluida- que es cuando más libre se expresan los miembros de la banda. También derrochó genialidad 'Till fell in love with you, bien orquestada y marcando el ecuador de un concierto un tanto encorsetado por los temas inamovibles, aunque es comprensible que Dylan interprete estos temas en escenarios que nunca ha visitado, pero insiste en repetirlos allí por donde pasó.

Canciones:
  1. Gotta serve somebody
  2. When I paint my masterpiece
  3. Watching the river flow
  4. Simple twist of fate
  5. Tweedle dee & tweedle dum
  6. I believe you
  7. 'Till fell in love with you
  8. Trying to get to heaven
  9. It's all right
  10. Desolation row
  11. Honest with me
  12. When the deal goes down
  13. Thunder on the mountain
  14. Like a rolling stone
  15. All along the watchtower
  16. Spirit on the water
  17. Blowin' in the wind

Banda: Bob Dylan, keyboard, guitar y armónica; Tony Garnier, bajo; George Recile, batería; Stu Kimball, guitarra rítmica; Denny Freeman, lead guitar, y Donnie Herron, violin, viola, banjo, mandolina eléctrica, pedal steel, lap steel.

Read more...

Changing of the guards. París, 6-7-1978





Grabada entre el 25 y el 27 de abril de 1978 para el álbum Street Legal, Changing of the guards reunía todos los ingredientes (pese a una discutida producción del disco) para llegar a convertirse en el tema estelar del vinilo, y así sucedió. Su riffs pegadizo, su melodía fresca de ritmo abierto, el moderado acompañamiento de las coristas con el que rematan los versos dylanianos y la letra misteriosa que se esconde tras éstos, qué más se podía pedir. Pero meses antes, y con este nuevo sonido pululando en su mente, Dylan arranca en febrero su gira de 1978 con unos conciertos ansiados por el público, después de un año de sequía en la carretera (1977) y haber dejado un buen sabor de boca con la troupe de la Rolling Thunder Revue. Bajo un enfoque musical distinto a la Rolling, Dylan se presenta ante su público con una imagen desconocida (más propia de un showman que a la de trotamundos de la Revue) y con un repertorio de más de cincuenta canciones transformadas por miles de arreglos, una selección de estos temas serían grabados para el álbum en directo por Japón Bob Dylan at Budokan. Dylan llega a París el 6 de mayo y presenta la versión de Changing of the guards que más me agrada de cuantas le he escuchado de los conciertos de 1978, pues a partir de aquí ya no dispongo de referencias a propósito de esta canción en vivo. Pese a ello, otros artistas la han versionado, como es el caso de Frank Black & the Catholics, en una actuación el 25 de mayo de 1994, o la más reciente y espléndida de Patti Smith, en su álbum de covers Twelve.



Dieciséis años
dieciséis banderas unidas en el campo
donde están en duelo el buen pastor
hombres y mujeres desesperados, divididos
desplegando sus alas bajo las hojas que caen.

El destino llama
avancé desde las sombras hacia el mercado
mercaderes y ladorens, hambrientos de poder, mi último trato frustrado
ella huele tan dulce como las praderas donde nació
cuando mediaba el estío, junto a la torre
La luna cruel
el capitán asiste a los festejos
y envía su pensamientos a una doncella amada
con un rostro azabache más allá de lo escrutable
el capitán está triste, péro aún espera ver su amor correspondido


Raparon su cabeza
estaba desgarrada entre Jupiter y Apolo
llegó un mensajero con un ruiseñor negro
la vi en las escaleras y tuve que seguirla
seguirla tras la fuente donde alzaron su velo.


Tropecé con mis pies
cabalgué dejando atrás la destrucción de las trincheras
con las sutras frescas bajo un corazón tatuado
curas renegados y brujitas traicioneras
repartían las flores que te había regalado


El palacio de los espejos
donde se reflejan los soldados perro
el camino sin final y el gemir de las campanas
las estancias vacías que guardan su recuerdo
donde voces de ángel susurran a las almas de otros tiempos


Ella lo despierta
cuarenta y ocho horas después, al salir el sol
junto a las cadenas rotas, laurel silvestre y piedras rodantes
ella implora, quiere saber qué medidas tomará él
él l rechaza y ella se aferra a los dorados rizos del hombre


Caballeros, dijo él
no necesito vuestra organización, he lustrado vuestros zapatos
he movido vuestras montañas y marcado vuestras cartas
pero el Edén está ardiendo, o están dispuestos a la aniquilación
o sus corazones habrán de tener coraje para el cambio de guardia


Llegará la paz
sobre ruedas de fuego con calma y esplendor
pero no habrá recompensa cuando caigan sus falsos ídolos
y la muerte se rinda con su pálido espectro replegado
entre el rey la reina de espadas.





Escucha aquí la versión del concierto en París el 7 de mayo de 1978.


Read more...

Malmö (Suecia), 28-3-2009. Vuelve la Granja de Maggie y The man in me, la del gran Lebowski

Al sur de Suecia, en la ciudad de Malmö, ubicada en la región de Escania, Dylan y su banda ofrecieron el quinto concierto de la gira europea 2009, y lo hicieron con el regreso del clásico Maggie's farm, con el que abrieron un espectáculo que impregnó el Malmö Arena de la esencia del blues y el jazz de este juglar incansable. Maggie's farm vuelve por sus fueros con la fuerza de su incontestable inconformismo. Debe ser ya la enésima versión que escucho de esta canción y aún arrastra matices que me sorprenden, siendo este carácter el que hace de este tema y su autor su genial intemporalidad. Maggie's farm dio paso a The man in me, un tema del álbum New Morning (1973) con el que Dylan no suele prodigarse, si bien llegó a un gran público al ser uno de los temas estelares para la película El gran Lebowsky (1998), de los hermanos Joel y Ethan Cohen. Era la sorpresa en este concierto, donde los segundos temas están adquiriendo protagonismo, bien interpretada, con fuerza para medirse con las estupendas versiones que presentó en sus giras de 1978 o la más reciente de Atlantic City el 18 de noviembre de 2000.

Como siempre, High water se convirtió en un tema interpretado con gran virtuosismo por la banda y acertadamente interpretado por Dylan, que no varió demasiado la versión de la ofrecida en el Globe Arena de Estocolmo. Incorporó, por otra parte, el doblete Ballad of Hollis Brown y The lonesome death of Hattie Carroll, que en la gira del año pasado solía tocar en un mismo concierto. Ambas canciones, que pertenecen al álbum The times they are a-changing, forman un dúo compacto, tanto en melodía como en la fuerza de sus letras, ambas de denuncia social. Y del resto, apenas que destacar que no se sucediera en otros conciertos de esta gira, donde hay bloques inamovibles sin destacadas variaciones ni giros, aunque me ha llamado la atención la versión de Beyond the horizon, una canción preciosa que dista leguas de cómo Dylan la interpretaba el año pasado, siendo esta de Malmö casi irreconocible si no fuera por la letra, aunque siempre acertada.

Canciones:

  1. Maggie's farm
  2. The man in me
  3. Watching the river flow
  4. When the deal goes down
  5. High water
  6. Stuck inside of the Mobile with the Memphis blues again
  7. Ballad of Hollis Brown
  8. Just like a woman
  9. Tweedle dee & tweedle dum
  10. Beyond the horizon
  11. Summer days
  12. The lonesome death of Hattie Carroll
  13. Highway 61
  14. Like a rolling stone
  15. All along the watchtower
  16. Spirit of the water
  17. Blowin' in the wind

Banda: Bob Dylan, keyboard, guitar y armónica; Tony Garnier, bajo; George Recile, batería; Stu Kimball, guitarra rítmica; Denny Freeman, lead guitar, y Donnie Herron, violin, viola, banjo, mandolina eléctrica, pedal steel, lap steel.

(Foto: Donni Herron, al violin, y Bob dylan, keyboard, en el concierto de Malmö. Autor: Bengavoice)

Read more...

Jonköping (Suecia), 27-3-2009. Con el blues de Million Miles y las ruedas en llamas


Un blues de antología resultó la versión de Million Miles, del clásico Times out of mind (1997), interpretado por Dylan en el Kinnarps Arena de Jönköping, en este tour europeo que nos va sorprendiendo a medida que avanza bajo el influjo, aún inédito en directo, del nuevo trabajo en estudio, del que ya hemos podido escuchar un adelanto con el tema Beyond heres lies nothing desde su página oficial. Era éste su cuarto concierto, tercero por tierras suecas, al que Dylan imprimió su sello particular abriendo el espectáculo con Leopard skin pill-box hat, del otrora antológico Blonde on Blonde (1966), aunque se despachó a gusto y para regozo de los asistentes con Million Miles, un blues de casi ocho minutos donde Dylan y su banda recrean un ambiente de misterio y complicidad nocturno alrededor de una historia de amor:

No puedo vivir sin tu amor, baja la luz de tu lámpara,
necesito hasta la última brizna para llevarla adónde voy,
a veces me pregunto cómo acabará todo,
trato de acercame pero sigo a un millón de millas.

Aún tenía una bala en la recámara para seguir sorprendido, entre temas ya manidos en su gira, aunque de bella interpretación y agradecidos por lo que representan, me refiero a los ya esperados It’s all right ma, Stuck inside…, Just like a woman, hasta Most likely you go your away (interpretado en séptimo lugar, cuando acostumbra a abrir con él), para disparar con los acordes de la siempre bien recibida This Wheel’s on fire (Esta rueda está en llamas), una canción compuesta junto al ya fallecido Rick Danko (bajista de The Band) durante los intensos días en la Big Pink para grabar decenas de temas que luego se conocerían como The basements tapes (Las cintas del sótano). Muy buena su interpretación en el centro del escenario armado sólo con su armónica. Y si bien la primera mitad del concierto siempre sorprende por la incorporación de algún tema que aún no ha tocado en la gira (en Jönkönping también interpretó por primera vez en este tour el clásico Don’t think twice, it’s all right), la recta final de concierto está demasiado enconsertada, sobre todo los tres bises, cuya secuencia ya es rutina, a la sazón All along the watchtower (ya resulta un poco cansina), Spirit on the water y el espléndido Blowin’ in the wind, con el que no importa que cierre los conciertos, pues la versión es magnífica.

Canciones:
  1. Leopard skin pill-box hat
  2. When I paint my masterpiece
  3. Don't think twice, all right
  4. The leeve's gonna break
  5. Just like a woman
  6. It's all right, ma
  7. Most likely you go your away
  8. Million miles
  9. Stuck inside of the Mobile with the Memphis blues again
  10. This Wheel's on fire
  11. Highway 61
  12. Make you fell my love
  13. Thunder on the mountain
  14. Like a rolling stone
  15. All along the watchtower
  16. Spirit on the water
  17. Blowin' in the wind
Banda: Bob Dylan, keyboard, guitar y armónica; Tony Garnier, bajo; George Recile, batería; Stu Kimball, guitarra rítmica; Denny Freeman, lead guitar, y Donnie Herron, violin, viola, banjo, mandolina eléctrica, pedal steel, lap steel.

(Foto: Un momento del concierto en Jönköping. Autor: Rotten Daughter.)

Read more...

Mozambique. New Orleans, 3-5-1976


Cuando escuché Mozambique por primera vez en el disco Desire me atrajo el sonido fresco y acústico, bien condimentado por el violín de Scarlet Rivera y la dulce voz de Emmylou Harris que acompaña a Dylan a lo largo del álbum. De aquella primera impresión se me quedó grabada la palabra romance, que Dylan canta en el segundo verso de la segunda estrofa y asocié rápidamente la canción a un idilio en la costa mozambiqueña. Luego, cuando supe del conflicto que había estallado en 1975 en aquel país africano -que luchaba por su independencia bajo el yugo colonial portugués- no daba crédito a que Dylan y el coautor de la letra, el dramaturgo Jacques Levi, después de unas fantásticas letras de protesta para el álbum Desire, se hubiesen limitado a componer una canción que chirriaba frivolidad en el conjunto del elepé, y no por el hecho de haberla compuesto, sino por haberla titulado Mozambique. Así que le atribuí la argucia de la ironía y dejé que esa idea se instalara en mí durante mucho tiempo. Escuchar esta canción en la versión en directo cambia de la noche al día y me quedo con la que Dylan interpretó el 3 de mayo de 1976 en Live at the Warehouse, en New Orleans, durante la segunda edición de la gira de la Rolling Thunder Revue. Es una versión magnífica que rivalida con la del 16 y 23 de mayo en Fort Worth y Fort Collins, respectivamente. Son muy similares, pero la de New Orleans me agrada porque reúne los matices que esta canción destila por los cuatro costados, incluso Dylan es más enérgico y menos cándido que en la grabación de estudio durante su interpretación. Después de esta gira, no conozco otra versión de Mozambique en directo, estoy casi convencido de que Dylan no la volvió a incluir en conciertos.


¡Qué delicia pasar en Mozambique
dos semanas de amores y de vino
cada novia besando a su cacique
bajo ese firmamento azul marino!
¡Cuántas monadas hay en Mozambique,
cuántas horas de idilio bizantino!
Todo el mundo se detiene a dar palique
para atizar algún fuego uterino
o insinuarse con un guiño ladino
¡Yacer con ella junto a ese mar divino
y rozar con tus dedos su meñique
musitando los secretos de tu psique
en la tierra del hechizo cristalino!
Cuando por fin te vas de Mozambique
y vuelves con nostalgia la mirada
hacia las olas, la arena y la ensenada
tu corazón de pronto se va a pique
porque comprendes bien que no habrá nada
como la vida libre en Mozambique.

Read more...

Studs Terkel, el radiofonista que vio en Dylan al artista de una Norteamérica necesitada de su voz


En octubre del año pasado moría en su casa de Chicago, a los 96 años, el gran radiofonista Louis Studs Terkel, reconocido escritor que ganó el Premio Putlizer por The good war y uno de los periodistas más convencidos de las cualidades artísticas de un primerizo Bob Dylan, un personaje que vino a dar a entender la necesidad que tenía Estados Unidos de una voz como aquella que fraseaba versos y poemas en defensa de los derechos civiles y los más desfavorecidos. Studs Terkel llevó a Bob Dylan a su programa, Wax Museum, aprovechando que el músico había actuado el 25 de abril en el club The Bear Chicago. La cinta de coleccionista (de buena calidad) recoge la hora de conversación mantenida en los estudios el 3 de mayo, en la que Dylan interpreta siete canciones, al término de cada una se desarrolla el diálogo. Esta entrevista tuvo una gran repercusión pues fue el momento en que Bob Dylan despeja las dudas acerca del sentido y significado de la canción A hard rain's..., que se asociaba a los peligros inminentes de una guerra nuclear tras el descubrimiento de las instalaciones para plataflorma de misiles en la isla de Cuba. Dylan asegura que nada de ello hay en la canción (en realidad, había sido compuesta un mes antes de que se desatara esta crisis, y además, Dylan ya tenía una canción registrada en marzo de 1963 en Broadside con el título Cuban Missle Crisis, gran desconocida por el público y en la que aborda específicamente este asunto). El músico aprovechó también las ondas para airear que estaba escribiendo un libro sobre su primera semana en Nueva York. Historias aparte, Dylan hizo una buena actuación en el programa de Studs Terkel, bordando A hard rain's..., y Boots of spanish leather, así como John Brown, la historia de un joven soldado que marcha a la guerra y regresa herido y trastornado. La cinta del programa ya es un documento para la historia de la música.


Studs Terkel's Wax Museum
Chicago, 1963

1. Farewell
2. A hard rain's a gonna fall
3. Bob Dylan's dream
4. Boots of spanish leather
5. John Brown
6. Who killed Davey Moore?
7. Blowin' in the wind

Read more...

Oslo (Spektrum), 25-3-2009. Nostalgia con When I paint my masterpiece y You ain't going nowhere


Música de calidad es lo que escucharon los noruegos el 25 de marzo en el Spektrum de Oslo y el buen gusto de Bob Dylan puesto en escena en un magnífico recinto que sirve anualmente de sede para el concierto del Premio Nobel de la Paz y del Music Award. Dylan y su banda abrieron su tercer concierto del tour europeo 2009 con Watching the river flow y no sé si fue casualidad o que el juglar de Minesota quiso que la secuencia del concierto continuase con When I paint my masterpiece y You ain't going nowhere, para rendir tributo a la nostalgia, evocando este trío el segundo volumen de la recopilación de éxitos de 1971, donde las tres canciones se presentaban como inéditas. Dylan está decidido, así lo ha demostrado en los dos anteriores conciertos en Estocolmo, a incorporar clásicos en su nueva gira. También intrpretó Ballad of a thin man (1965) y la intemporal A hard rain's a gonna fall, ambas de preciosa ejecución. Dylan está probando (ha tocado 39 canciones distintas en solo tres conciertos) y a medida que transcurre la gira acomoda su repertorio. Ya en Oslo repite los clásicos del tour (Stuck inside..., Highway 61, Like a rolling stone, All along the watchtower, etcétera) y va incorporando los de siempre (It's all right, ma o Just like a woman, por ejemplo); en cambio, los temas de su próximo álbum los tiene bien guardaditos.

When I paint my masterpiece fue la joya del concierto y una de las mejores versiones en directo que le he escuchado desde los tiempos de la Rolling Thunder Revue en 1975, cuando interpretaba este tema disfrazado con una careta del presidente dimisionario Richard Nixon. En el centro del escenario, frasendo cada verso para rematarlo con la armónica al más puro estilo dylaniano. También estuvo muy acertado con You ain't going nowhere y recuperando su ya clásico de los directos It's all right ma. Y antes de entrar en un segundo set se dejó llevar por la bella melodía de Just like a woman, y como queriendo hacer cómplice al público, retardó su entrada al estribillo y el público, que se percató, empezó a corearlo para disfrute de todos. Ballad of a thin man estuvo muy bien interpretada, es un clásico de 1965 que me encanta por su inventiva y la fuerza de su melodía.

De nuevo hizo una pequeña, pero grandiosa concesión a la guitarra, y la cogió para interpretar I don't believe you, y ya subrayé en la crónica del concierto del Globe Arena en Estocolmo, la banda ya es otra sin ese sonido cavernario y místico del teclado que Dylan se empeña en destacar. El resto del concierto ya es conocido de los dos anteriores, produciéndose pocas variantes, sin embargo, no podemos dejar pasar por alto el fantástico, por su virtuosismo, trabajo realizado por Tony Garnier al contrabajo en The levee's gonna break, When the deals goes down y en A hard rain's a gonna fall, el último de los clásicos que Dylan interpreta en Oslo con una buena versión, aunque lejos aún de la que entregó a la Expo Zaragoza el año pasado. Por su parte, Donnie Herron demuestra su calidad de músico en el acompañamiento al violín en It's all right ma y Blowin' in the wind, con esta última Dylan vuelve, como hiciera en el Globe Arena, a echar el telón.

Canciones:

  1. Watching the river flow
  2. When I paint my masterpiece
  3. You ain't going nowhere
  4. It's all right, ma
  5. Just like a woman
  6. Stuck inside of the Mobile with the Memphis blues again
  7. Ballad of a thin man
  8. I don't believe you
  9. The levee's gonna break
  10. When the deals goes down
  11. Highway 61
  12. A hard rain's a gonna fall
  13. Thunder on the mountain
  14. Like a rolling stone
  15. All along the watchtower
  16. Spirit on the water
  17. Blowin' in the wind.

Banda: Bob Dylan, keyboard, guitar y armónica; Tony Garnier, bajo; George Recile, batería; Stu Kimball, guitarra rítmica; Denny Freeman, lead guitar, y Donnie Herron, violin, viola, banjo, mandolina eléctrica, pedal steel, lap steel.

(Foto: Dylan interpreta "When I paint my masterpiece" en el concierto del Spektrum. Autora: Ketil Blom.)

Read more...

Mississippi. Londres, 22-11-2005.



Compuesta para ser publicada en el álbum Time out of mind, de 1997, bajo la excelente producción de Daniel Lanois (que ya había dirigido en 1989 el disco Oh Mercy), el tema no llegó a la carátula después de varias tomas a cada cual más interesante (escuchar las tres publicadas en el bootleg series vol. 8, la primera de todas -acústica- es para descubrirse). Así que, hubo que esperar cuatro años hasta la aparición del siguiente trabajo oficial, Love and theft, ahora producido por el propio Dylan (con el seudónimo Jack Frost), cuando Mississipi llega al público con una versión pegadiza y muy a tono con el resto de canciones de este álbum a caballo entre el blues y el jazz. Si bien el debut en directo de esta canción se produce el 9 de octubre en el Jackson County Fairgrounds, de Central Point (Oregón), con una buena versión, sigo escuchando por creativa la que Dylan borda el 22 de noviembre de 2005 en Brixton Academy, Londres, bien arropado por su banda en unos momentos de gran inspiración. La cantante Sheryl Crow ha versionado este tema realzándolo melodiosamente -un rasgo típico en ella-, en 1988 lo hizo en versión acústica en una toma de estudio, y el 31 de octubre de 1999, en Mountain View, lo interpretó también acústico pero con banda, no hay variación objetable de uno a otro. La letra de la canción me agrada y según manifestó Dylan a propósito en la revista Rolling Stone el tema está "más relacionado con la Declaración de Independencia, la Constitución y los derechos civiles que con brujos o curanderos".

Cada paso que damos pisamos la raya
tus dias están contados, y también los míos
el tiempo se acumula, luchamo y sufrimos
estamos acorralados, no hay vía de escape


La ciudad es una jungla; más partidas que jugar
atrapado en su corazón trato de escapar
me criaron en el campo, trabajo en la ciudad
y he tenido problemas desde que aterricé


No tengo nada para tí, ni tuve nada antes
ni siquiera tengo ya nada para mí
el cielo en llamas, el dolor que se derrama
nada puedes venderme, ya te veré por ahí


Mi fuerza expresiva y mis ideas sublimes
jamás te harían justici en prosa o en verso
sólo cometí un error
quedarme en Misisipi un día de más...


Escucha aquí la canción extraída del concierto de Londres en 2005:



Pie de foto: Un momento de la actuación de Dyla y su banda en Londres el 22 de noviembre de 2005. (Autor: Stephen Burch)

Read more...

Emotionally yours. Birmingham, 12-10-1987




Bob Dylan y Tom Petty and The Heartbreakers ponen en escena unos magníficos conciertos de la gira Temples of Flames (Templos en Llamas) que asola musicalmente la vieja Europa en el otoño de 1987. Del tercer concierto ofrecido en la ciudad inglesa de Birmingham, el 12 de octubre, es esta versión que destaco de Emotionally yours, un clásico del Empire Burlesque (1985) magistralmente interpretado en el Internacional Arena National Exhibition Center. Dylan puso mucho de su parte en la composición de este tema y esperaba de él bastante más de lo que realmente dio de sí, pero ahora, escuchándolo en directo, dos años después de su grabación oficial, se reconoce la calidad indiscutible de este poema musicalizado. Dylan navega por el tema en un fraseo agradable, sacando a la canción todos sus matices, bien acolchado por una banda que le sigue sin dilación (llevan la friolera de más de ochenta conciertos desde 1986) y por si necesitara algo más, las Queens of Rhythm (Carolyn Dennis, Queen Esther Marrow y Madelyn Quebec) le siguen discretamente con sus segundas voces. El tema está extraído de una compilación pirata de canciones del tour europeo bajo el título de Temples of Flames. Un mes antes, el 7 de septiembre, Dylan y su grupo interpretaron este tema en Jerusalem, y es otro directo a tener en cuenta, del que subrayaría la incorporación de la armonica que le confiere un estilo genuino dylaniano, pero lejos aún de la fuerza emotiva e interpretatva de Birminghan. Después de la gira con Petty, la canción se cae del repertorio en directo para dar paso a otros temas, y es rescatada en 1991 por el grupo soul The O'Jays, cuya versión logra un éxito en el mercado musical.



Ven, nena, búscame, recuérdame dónde empecé,
demuestra que me conoces, díme que eres la única, yo podría aprender, tú quizá quieras ver qué se esconde tras la puerta, pero siempre seré emocionalmente tuyo. Méceme, enciérrame en las sombras de tu corazón, enséñame, alcánzame, deja que comience la música, yo podría estar soñando, pero sigo creyendo que eres aquélla por quien vivo y siempre seré emocionalmente tuyo. Es como si mi vida no hubiese sucedido, cuando te veo, es como si nunca hubiera tenido un pensamiento, sé que este sueño puede ser un locura, pero es el único que tengo. Ven, nena, sacúdeme; tómame, estaré satisfecho, abrázame, ayúdame, mis brazos están abiertos, yo podría desenredarme donde quiera que vaya, incluso en orillas lejanas, pero siempre seré emocionalmente tuyo.



Escucha aquí la versión grabada en el concierto de Birmingham el 12 de octubre de 1987


Read more...

Estocolmo, (Globe Arena), 23-3-2009. Y entonces llegaron los gitanos con One more cup of coffee


Tony Garnier, bajista y líder de la banda de Dylan, es un músico de pura raza, y durante su actuación el pasado domingo en el Globe Arena de Estocolmo (segundo de los conciertos de la gira europea 2009) hizo lo que mejor sabe: llevar a la banda a una compenetración que posibilitara a Dylan una salida a flote en su encuentro con el público sueco después de dos años, barnizando un concierto de mejor textura que el celebrado el día anterior en el Berns Salonger. De entrada, la selección de temas es, en mi opinión, mucho más acertada, si bien el aforo del Berns, más limitado, se presta a una actuación más intimista que en el Globe, que requiere además de temas que conjunten, de una acertada secuencia de los mismos. Y así fue cómo este concierto tuvo una definición más artística, pese a que Dylan se empeñara en destacar el sonido de su teclado, insistiendo en hacer solos con éste, que la música, a ratos, sonaba a claustro monacal. Pero en fin, en honor a Garnier, magistral su acompañamiento del ritmo en High Water (for Charley Patton), por señalar un tema. Virtuosismo además que se ganó a pulso Donnie Herron al violín, que lo hizo fantástico en Blowin' in the wind, el tema con el que los músicos echaron el telón.

Bien, ¿y Dylan? Anda el maestro con la voz cascada, que de seguro habrá echado el resto en la grabación de su nuevo disco, Together Through life (Juntos por la vida), incluso a veces su fraseo entrecortado produce cierta preocupación... no sé cómo salva el tipo, debe ser por algo que sólo está a merced de los genios. Dylan despertó en este segundo concierto y no fue en la interpretación de la apertura con Rainy days women (que estuvo aceptable), sino en una sugerente High Water, que vino después de unas normalitas Lay, lady, lay y Tangled up in blue (ésta con nuevos arreglos), y la literaria Chimes of freedom, que alberga el encanto de los años de protesta. High Water dio paso a Stuck inside..., al que Dylan hizo algunos arreglos con respecto al concierto anterior, empezando con un solo de armónica y sintiendose seguro en una canción que le gusta enormemente.

Tres temas de Modern Times despejaron dudas acerca del silencio de este repertorio en Berns Salonger: Rollin' and tumblin', de magnífica interpretación y bien orquestada; Thunder on the mountain, que se instala en los últimos lugares sin llegar a los bises, y Spirit on the water que sí lo hizo, tocada en penúltimo lugar y donde Dylan se explayó con su teclado en detrimento de esa guitarra de jazz de la que tan necesitada se queda esta canción. El resto: una Desolation row, con insistencia en el organillo; adorable Make you feel my love; pasable Love sick, y nada nuevo que aporte Highway 61, All along the watchtower y Like a rolling stone.

Y entonces llegaron los gitanos con One more cup of coffee para matar el gusanillo a un público ávido de escuchar temas nuevos. Para su interpretación, Bob Dylan cogió la guitarra y los oídos comenzaron a inundarse de un sonido fresco e imaginativo. No hacía tanto tiempo que Dylan interpretara este tema en directo, la última vez fue el 20 de septiembre de 2007 en el concierto celebrado en Nashville y lo hizo a dúo con Jack White (quien, por cierto, también interpretó en aquella ocasión la canción Outlaw blues -del álbum Highway 61 revisited- y que Dylan llevaba por primera vez a un concierto, en esta ocasión acompañó a White con la armónica). La versión de One more cup of coffee en el Globe Arena es fantástica y podría ser éste el sonido, junto con el de Billy, el que diera relevancia a esta gira, ¡es el sonido que la banda ejecuta maravillosamente!

Pero ¿qué pueden tener en común estas dos canciones para que Dylan las haya interpretado en los dos primeros conciertos? Ambos temas remiten geográficamente a un lugar: Nuevo México, un lugar que resulta agradable para Bob Dylan y en el que ha realizado interesantes trabajos, como la banda sonora de Pat Garret y Billy the kid, y las canciones Romance in Durango (en la casa de Sam Peckimpah) y One more cup of coffee, ambas del álbum Dessire. No hace mucho se especulaba que Dylan había imprimido a su nuevo disco cierto estilo de música cercano a Nuevo México y que incluso la colaboración de David Hidalgo, del grupo Los Lobos, tocando el acordeón, reforzaba esta idea. ¿Pudiera ser que Dylan esté preparando a la audiencia en el nuevo sonido de su próximo álbum?

Canciones:

  1. Rainy day women 12#35
  2. Lay, lady, lay
  3. Tangled up in blue
  4. Chimes of freedom
  5. High water (for Charley Patton)
  6. Stuck inside of the Mobile with the Memphis blues again
  7. Love sick
  8. Desolation row
  9. Rollin' and Tumblin'
  10. Make you feel my love
  11. Highway 61
  12. One more cup of coffee
  13. Thunder on the mountain
  14. Like a rolling stone
  15. All along the watchtower
  16. Spirit on the water
  17. Blowin' in the wind

Banda: Bob Dylan, keyboard, guitarra y armónica; Tony Garnier, bajo; George Recile, batería; Stu Kimball, guitarra rítmica; Denny Freeman, lead guitar, y Donnie Herron, violin, viola, banjo, mandolina eléctrica, pedal steel, lap steel.

(Foto: Dylan y su banda interpretan "One more cup of coffee en el Globe Arena. Autor: Buda).

Read more...

Estocolmo (Berns Salonger), 22-3-2009. Primera interpretación del tema Billy en directo


Cinco temas de Berns Salonger, de los diecisiete que Dylan acostumbra a interpretar en cada concierto, me han agradado bastante como para pensar que esta gira pudiera tener una esencia escondida que saldrá del frasco a medida que avance. Blind Willie McTell, en una versión que es difícil que deje indiferente; I don’t believe you, que hacía tiempo no la escuchaba en directo y que en Berns interpreta con soltura, incorporando un buen juego de armónica; la tercera es Cry a While, ya casi al final del concierto y como antesala a Like a rolling Stone (la versión de este clásico admite los arreglos que se le echen, es siempre bien recibida), y Billy, que me ha sorprendido y en la que Dylan se esfuerza por hacer una buena interpretación. Es la primera vez que Dylan versiona esta canción al directo. Fue grabada por el músico para la banda sonora de la película Pat Garret y Billy the kid, del director Sam Peckimpah, e incluída en el álbum del mismo nombre de 1973.

Arranca así la gira 2009 y en Berns Salonger el tour de primavera por Europa. El lujoso escenario de la capital sueca fue el escenario el domingo de un concierto donde los músicos presentaron viejos temas con suaves arreglos y en el que Dylan, tocado con su sempiterno sombrero negro de ala ancha e indumentaria de oscuro riguroso, siempre hierático, incorregiblemente austero, hubo de dejar un tanto sorprendida a la audiencia al no presentar tema alguno de su próximo álbum, Together throught life, (que saldrá al mercado a finales de abril), lo que produce cierta desilusión ante las perspectivas creadas en torno al nuevo trabajo; tampoco interpretó canciones de su anterior álbum, Modern Times (2006), que fue el armazón de su gira del año pasado, logrando, por último, captar el interés del público al incorporar a su libreto la canción Billy. Interpretada en duodécimo lugar, la canción empieza con un buen solo de armónica, Dylan imprime su peculiar fraseo y el público responde con aplausos al terminar la primera estrofa al percatarse del insólito momento que están viviendo. La canción se desarrolla muy bien durante los seis minutos y medio que dura su actuación.

Fue el de Berns, sin embargo, un concierto desigual, algo por lo general previsible en los comienzos de gira, pero aceptable, en mi opinión. Most likely you go your way fue la escogida como apertura y, pese a su característico ritmo marcial, se cargó de innecesaria lentitud, en una interpretación no demasiado acertada. Señor, I’ll be your baby tonight, Stuck inside of Mobile with the Memphis blues again (que estrenaba arreglo) y Tryin’ to get to heaven, se sucedieron a continuación de manera distinta, logrando esta última un atisbo de la maestría de Dylan en directo. Dylan sólo cogió la guitarra para acompañar la interpretación de Things have changed, y el concierto ganó en altura. La banda realiza un buen trabajo aunque, pudiera ser por los arreglos o que estemos al principio de la gira, existen diferencias con respecto a los últimos conciertos de la gira del año pasado. Y es que, en esta ocasión destaca como nunca el órgano (keyboard) sobre el que se parapeta Bob Dylan, que imprime al ambiente un clima místico en detrimento del estilo jazzístico que tan buen sabor de boca nos dejó la gira anterior. Quizá este singular sonido pueda estar en consonancia al nuevo estilo con el que nos quiere sorprender en su próximo álbum.

Canciones:

  1. Most likely you go your way
  2. Señor
  3. I’ll be your baby tonight
  4. Stuck inside of the Mobbile with the Memphis blues again
  5. Tryin’ to get to heaven
  6. Things have changed
  7. Watching the river flow
  8. Blind Willie McTell
  9. I don't believe you
  10. I believe in you
  11. Honest with me
  12. Billy
  13. Summer days
  14. All along the watchtower
  15. Cry a while
  16. Like a rolling stone
  17. Forever Young
Banda: Bob Dylan, keyboard, guitarra y armónica; Tony Garnier, bajo; George Recile, batería; Stu Kimball, guitarra rítmica; Denny Freeman, lead guitar, y Donnie Herron, violin, viola, banjo, mandolina eléctrica, pedal steel, lap steel.

(Foto: Un momento de la actuación de Dylan en Berns Salonger, Estocolmo).

Read more...

Un día antes de la esperada gira bajo el influjo de las canciones del nuevo álbum



Bob Dylan comienza mañana domingo (22 de marzo) su gira 2009 en el Berns Salonger, de Estocolmo, ciudad en la que repetirá el lunes con su banda en el Globen Arena. Un total de 31 conciertos por diversas ciudades europeas, un magnífico escaparate para promocionar su nuevo álbum, Together Throught life (Juntos por la vida), que Columbia Record ha anunciado su salida al mercado para finales de abril. Dylan vuelve a la carretera después de cuatro meses (el último concierto de 2008 fue el 21 de noviembre en Nueva York) durante los que, presumiblemente, habrá pulido las pistas de Together…, perfilado las líneas del segundo volumen de sus memorias (Crónicas volumen 2) que, de cumplirse las previsiones, estará en las librerías el próximo otoño, y ensayado con su banda las canciones que formarán su libreto para la gira.

Una gira esta de 2009 que ha ido creciendo en expectación tras conocerse la grabación de su nuevo álbum, y del buen sabor que dejó el anterior, Modern Times (2006), cuyos temas constituyeron el pilar sobre el que se sustentó la gira del año pasado. Porque a finales de diciembre, cuando nada se sabía acerca de las nuevas canciones, el público se hallaba desconcertado y nos preguntábamos cómo iba a ser el planteamiento para los tours de este año. Despejada en parte esta incertidumbre, ahora sabemos que en ciudades como Oslo, Munich o Londres se oirán los temas nuevos, según la web oficial, si bien deseamos que se haga extensible a todos los conciertos.

Tampoco se ha confirmado la composición de la banda, pero de lo que sí es seguro es que Dylan no suele cambiar a sus miembros así como así. De esta manera, y ante la ausencia de información oficial, hemos de presuponer que Dylan cuenta con la banda de sus últimos años, a la sazón Stu Kimball y Denny Freeman, guitarras; Dannie Herron, violín, mandolina y steel guitar; Tony Garnier, bajo, y a la batería y percusión, George Receli. Una banda a la medida del juglar de Minesota y perfectamente compenetrada. En cualquier caso, habrá que esperar a los primeros conciertos para ver qué nos deparará esta gira del maestro Bob.

(Poster: Cartel anunciador de la gira por el Reino Unido)

Read more...

Tombstone blues. Londres 31-3-1995



Hay varios momentos en la historia musical de Bob Dylan donde Tombstone blues se convierte en pieza imprescindible del directo, pese a ser, en el fondo, un tema poco identificable por el público, lo que ha motivado su desconocimiento tras la publicación del álbum Highway 61 revisited (1965) donde fue incluida en el set tras el laureado Like a rolling stone, y a una versiones en directo durante ese año más bien flojitas. Entonces era un tema que contribuía a reforzar la imagen eléctrica de Dylan tras Newport 65, aunque habrían de pasar los años hasta que Dylan la incorporara al libreto de sus conciertos. Tombstone blues (El blues de la lápida) renació durante la gira europea de 1984, bien acolchada tras la guitarra de Carlos Santana, convirtiéndose en ese directo imprescidible que Dylan paseaba por los grandes estadios de Europa. Fueron estas versiones con Carlos Santana, quien le imprimió su estilo y talento, las que lograron captar el interés del público. Un blues con tintes de genuino rock. De esa época destacaría la versión ofrecida en Barcelona el 28 de junio (uno de los mejores conciertos de la gira), si bien fue la de Newcastle la que se incluyó en el álbum oficial de la gira Real Live. Tras el apoteósito concierto de Slane de final de la gira europea del 84, Tombstone blues fue nuevamente sepultada y durante once años ya no supimos más de esta estupenda canción. Por fortuna, Dylan la rescataría durante la gira de 1995 y en el tercer concierto ofrecido en la Brixton Academy de Londres, el 31 de marzo, interpreta una versión de cerca de ocho minutos elevando Tombstone Blues a clásico. Versión sólida, interpretada con profundidad y acierto, manteniendo el ritmo sin pausa, creando expectación en cada verso, con solos de guitarra discretos y elegantes de John Jackson -en desigual disposición al estridente Bloomfield en 1965 o el gurú Santana de 1984-, radiante Tony Garnier -como siempre-, y acertado Winston Watson a la batería. Meses después, el 19 de julio de 1995, Dylan cambiaría levemente esta versión en Madrid, conservando su magia, eso sí, que mantendría incluso en la toma para la MTV durante la grabación del Unplagged. En el House of Blues, de Atlanta, en agosto de 1996, podemos escucharle aún una buena versión y después de esto, ya en las giras posteriores a 2000, se apagó poco a poco la estrella del encandilamiento. Y aunque Tombstone blues pudiera interpretarse como una gran desconocida, no lo ha sido para cantantes como Richie Havens, que hizo una magnífica versión para la banda sonora de la película I'm not there, o la del grupo Hit and Run Bluegrass, que la transformó al country en su concierto del 11 de mayo de 2005 en la ciudad estadounidense de Boulder, en Colorado.


Donde Ma Rainey y Beethoven desplegaron su saco de dormir
los que tocan la tuba ensayan en torno al asta de bandera
y el Banco Nacional vende por lucro mapas del alma
al asilo de ancianos y la facultad.
Ahora desearía escribirle una melodia tan simple
que pudiera evitarle, querida señora, la demencia
que la reconfortara, calmara y aliviara el dolor
de su saber peregrino e inutil

Mamá está en la fábrica
no tiene zapatos.
Papá en un callejón
buscando el fusible.
yo ando por las calles
con el blues de la lápida.


Escucha aquí la versión de Tombstone Blues en Londres:




(Foto: Un momento del concierto de Dylan en Londres el 31-3-1995.)

Read more...

Bob Dylan's 115th dream. New York, 19-10-1988

Si Dylan no hubiese aceptado los sabios consejos de Jerry García, líder de la Gratefuld Death, banda con la que compartió escenario durante buena parte de 1987, nunca hubiera versionado un tema como Bob Dylan's 115th dream y tantos otros olvidados en la noche de los tiempos (es el caso de Joey, o Queen Jane approximately), reinventados con mayor o menor suerte, acogidos por desigual entre el público, pero siempre sorprendentes en este ingenioso juglar. La versión de este Sueño 115 de Bob Dylan, interpretado en New York la noche del 19 de octubre, me agrada tanto en el fraseo como en el acompañamiento. Dylan estrenó esta canción en directo seis días antes, en el concierto de Upper Darby, con el que abría el tour por la Costa Este estadounidense dentro de la Interstate 88, y entre ésta y la de Nueva York hay evidentes diferencias que se resuelven a favor del último concierto, al ser una versión más lograda -aunque llega con la voz cansada, que no cascada-, en una intepretación más tranquila y una banda menos acelerada, suena más rockera que la folk-country de Upper Darby. Después de Nueva York, no he vuelto a escuchar esta canción en directo, quizás sólo fue una operación de rescate, en mi opinión aceptable. Bob Dylan's 115th dream fue publicada el álbum Bringing it all back home (1965) en versión folk con banda.


Iba a bordo del Mayflower
cuando creí avistar tierra
grité al capitán Arab
para que ustedes lo entiendan
vino corriendo cubierta
dijo: "Olvidaos de la ballena
mirad a lo lejos
parad las máquinas
cambiad la vela
jalad la bolina"
entonamos la canción
que cantan los rudos marinos
cuando están en alta mar


Escucha aquí la versión de esta canción en Nueva York, 19-10-1988

Read more...

Cat's in the well. Towson (Maryland) 19-11-2000


Sin atisbo de duda: Aquella noche de noviembre en el Towson Arena Center, Dylan tuvo a las musas y a un puñado de excelentes músicos de su lado, juntos convirtieron Cat's in the well (El gato está en el pozo) en la mejor versión en directo que he escuchado. No quiero insistir en la genial, genuina e insuperable gira de otoño de 2000 por ciudades estadounidenses, pero es que se sale de madre... El tema en cuestión, que cierra el injustamente denostado álbum oficial Under the red sky (1990), estuvo diez años en los escenarios (es una canción con la que Dylan suele incluso abrir sus actuaciones) variando constantemente de arreglos (no hay más que escuchar las flojitas de 1993 —sin ir más lejos, Londres, 9 de febrero; o 2 de julio en Vitoria—), hasta llegar a 2000 con una contundente interpretación. Algo de esta buena suerte también se vivió en Borgholm (Sweden) un año más tarde la noche del 3 de julio, una interpretación destacable, que se vendría abajo con el tiempo, y me remito al concierto en Manchester (Tenesee) el 11 de julio de 2004, donde lo único destacable de esta versión es el principio, con un solo insólito de armónica en este tema. Dylan hizo una toma oficial en Under the red sky simpática, con un riff característico que la hace inconfundible, como anteriormente hiciera con temas como Drifter's escape o The Wicked Messenger, ambos del álbum John Wesley HardingCat's in the well fue grabada el 6 de enero de 1990 en los Oceanway Studios de Los Ángeles y forma parte del conjunto de canciones con un contenido infantil contenido en el álbum.

Escucha Cat's in the well en el concierto de
 Towson el 19 de noviembre de 2000

El gato está en el pozo

El gato está en el pozo, el lobo mira hacia abajo,
su gran cola peluda va barriendo el suelo.
El gato está en el pozo, la dama está dormida,
ella no oye nada, el silencio la ha amordazado.
El gato está en el pozo y su dolor muestra su rostro.
El mundo es una hecatombe y esos es algo despreciable.
El gato está en el pozo y el caballo trota que trota,
Sally la del callejón hace el salto americano.
El gato está en el pozo y papá lee las noticias,
se le está cayendo el pelo y las niñas necesitan zapatos.
El gato está en el pozo y el establo lleno de mierda,
es tan larga la noche y la mesa está repleta.
El gato está en el pozo y el siervo en la puerta,
las bebidas están listas y los perros van a la guerra.
El gato está en el pozo, las hojas empiezan a caer,
buenas noches, mi amor, que el Señor tenga piedad.

Read more...

High water (for Chaley Patton). Stockton, (California), 3-4-2006

¡Qué tributo para Charley Patton (el legendario cantante delta blues del Misisipi) este tema rebosante del más puro estilo sureño estadounidense que Dylan interpreta en Stockton (California) de manera convincente, sin artifugios, bien arropado por la banda, que no desperdicia momentos para los solos, ya sean de guitarra o mandolina y para el lucimiento de un bajo que no da tregua! Magnífica versión, aunque también golpea en mi mente la ofrecida cuatro años antes, el 7 de octubre en la también ciudad californiana de Red Bluff, quizá más envolvente y menos pausada: suma en fuerza rockera; resta en matices. Tampoco es descartable la toma oficial que se incluyó en el álbum Love and Theft (2001), en sintonia con Stockton. Una canción que trae asociado el recuerdo del ancestro Charley Patton, uno de los músicos que más ha influido en la música popular estadounidense. High Water llegó a España en dos giras, la primera en el verano de 2004 (interpretada en las ciudades de Córdoba -11 de julio, bien orquestada y sonido agradable- y en Santiago de Compostela -17 de julio, sin demasiadas variaciones con respecto a la anterior-), y cuatro años después en Pamplona, Alicante, Lorca, Arganda del Rey y cerrando la gira europea el 10 de julio en Mérida: aceptable.

Suben las aguas, seis pulgadas sobre mi cabeza/ lo ataúdes caen por la calle/ como globos de plomo/ el agua anega Vicksburg, no sé qué voy a hacer/ dijo: "no me pidas ayuda"/ "¿No ves que también me ahogo?"/ Pinta mal ahí afuera/ hay crecida por doquier.


Versión de High Water en Stockton (California), 3-4-2006



Read more...

Buckets of rain. Detroit 18-11-1990


Buckets of rain pasa casi desapercibida en el álbum Blood on the tracks (1975), plagado de grandes éxitos, y aunque no es una canción que haya llegado a todo el público, reúne sin embargo todos los ingredientes para erigirse en un clásico. Un lujo acústico, brilla por su sencillez y brevedad, que incita a escucharla una y otra vez. La versión con banda en Detroit (Michigan) es todo lo contrario, pero no chirría. Es la única vez que Dylan ha interpretado esta canción en directo, y para concurrir con esta circunstancia no podía echarle mejor aditivo: apertura del último concierto de la gira de otoño de 1990, el 263 de la Never Ending Tour. Casi ná. Es una aceptable versión la de Detroit, con un simpático juego de armónica, instrumento que escamoteó en el álbum oficial. Buen acompañamiento de una banda compenetrada: John Staehely y César Diaz (guitarras), el bueno de Tony Garnier (bajo) y Chiistopher Parker (batería). Dylan se encuentra còmodo interpretando la canción y el público parece darse cuenta de que desde el primer minuto está asistiendo a un momento inédito. La vida es triste/ la vida es una ruina/ sólo puedes hacer lo que debes/ hazlo y hazlo bien/ yo lo haré por tí, niña mía/ ¿no lo ves?. Bien, la canción ha dado otros juegos en manos de otra gente, en otros ámbitos y con otras voces. Es el caso de la versión conjunta de Bette Miller y Dylan en el álbum de ésta Songs for the new depression, de 1976, simpática y muy melódica, a caballo entre el folk y el country, con un intercambio de palabras entre ambos mientras la música va descendiendo. Dos versiones posteriores brillan con corte y estilo desigual, en lo que conciden es en la extensa duración del tema, ambas superan los ocho minutos. Dann Otthermiller la interpreta el 13 de febrero de 2004 en Mount Joy (Irlanda) en un lento acústico, mientras el grupo Moore Trio hace un instrumental de jazz en Amberes el 4 de diciembre de 2005. Ambas versiones son dignas de tener en cuenta. En 2007 (7 de noviembre) se graba una versión de Buckets of rain en directo de Jimmy Lafove en un concierto de Nueva York bajo el título de I'm not there, que nada tiene que ver con la banda sonora de la película del mismo nombre. Por su parte, Jeffrey Foucault convierte esta canción en un hermosa balada acústica en la noche parisina del 21 de febrero de 2008.


Escucha la versión en directo en Detroit, 18 de noviembre de 1990.




Bob Dylan, en Nueva York, 1990. (Autor: John Hume).

Read more...

Nueva York. Carnegie Hall. 26-10-1963. De cómo Dylan entra en el Olimpo de la música folk

Carnegie Hall fue el espaldarazo que necesitaba Bob Dylan en 1963 para alcanzar el reconocimiento como compositor por el buen trabajo realizado durante tres años tras su llegada al Greenwich Village y, para no ser menos, el Olimpo de la música folk neoyorquina se rindió a sus pies. Dylan dejó patente aquel sábado noche que se había ganado a pulso su lugar entre los mejores, y ofreció un concierto sublime, cargado de buenas sensaciones, con una interpretación tan contundente como sosegado resultó su acompañamiento a la guitarra y armónica. A lo largo del año había viajado a Londres,, Misisipi, Washington y había actuado en los festivales de Newport y Forest Hill impregnando los ambientes de un insondable deseo de cambio, en pro de la defensa de los derechos civiles y de amor fuera cual fuese el color de la piel. Dos días antes del concierto había grabado The times they are a-changing, la canción con la que abriría y daría título a su tercer álbum, algunas de cuyas canciones ya había interpretado en otros foros comenzando a cosechar un incipiente éxito tras su aclamado The Freewheelin' de mayo de este mismo año. Temas como The times..., With God on our side, Only a pawn in the game, entre otros del nuevo disco, rivalidaban con los que, de intachable lirica y melodía, quedaban excluídos del vinilo. Conocedor de esta singular experiencia, fruto de una inspiración incontenible, Dylan incorporó al libreto del concierto varios de estos temas, algunos de los cuales ya eran conocidos por el público asistente, que agotó las entradas días antes del concierto, abarrotando la imponente estampa de este coliseo. Entre los asistentes, los padres de Dylan (Abe y Betty Zimmemann), quienes habían viajado expresamente desde Hibbings (Minesota) para escuchar a su vástago artista.



Bob Dylan, durante las pruebas de sonido en el Carnegie Hall. (foto: Don Hunstein).


Ubicado entre la séptima avenida y la calle 57, a sólo dos manzanas de Central Park, la inconfundible fachada de ladrillo ocre y detalles en terracota del Carnegie Hall alberga las salas de conciertos más admiradas por la ciudad de Nueva York. Dylan atravesó sus puertas la noche del 26 de octubre de 1963 para ofrecer un concierto del que, lamentablemente, durante muchos años no se dispuso de una grabación íntegra. Sin embargo, a la media docena de canciones que circulaban entre los coleccionistas hace algo más de dos décadas, se han ido sumando hasta completar las diecinueve de aquella actuación que bien hubiera merecido un disco oficial en directo. Y algo de ello se intentó, como ya referimos en el artículo sobre el álbum inédito In concert (escrito el 11-2-2009, etiqueta albumes 1960-69), que recogía grabaciones de este concierto y el ofrecido el 12 de abril en el Tow Hall de Nueva York. El proyecto se quedó en el cajón, y durante largos años nos tuvimos que conformar con escuchar los seis temas de las primeras cintas que circularon, a la sazón The times..., Ballad of Hollis Brown, Boots of Spanish leather, Lay down your weary tune, North country blues y Whit God on our side, todos ellos del nuevo álbum y uno sólo -Lay down...- que fue descartado del disco oficial. La calidad del sonido de la cinta pirata ya completa es excelente y una gozada su audición. Dylan maneja el directo con una profesionalidad sorprendente -ha cogido tablas y lo demuestra de una manera impepinable-. Soberbia The Times, así como Hollis Brown (ya escogí esta versión para destacar el tema en el apartado de canciones en directo -ver etiqueta Canciones -B-), muy bien llevada en el fraseo Boots of spanish leather, así como With god... Pero escuchar la versión de Nort country blues te muestra el genio que este juglar lleva dentro, es sorprendente, sólo por esta canción valía la pena perseguir esta cinta hasta los confines del mercado negro. Sin embargo, pocas veces le he vuelto a escuchar esta canción en directo, ya fuera como un documento histórico relevante (concierto Newport 16-2-1963) o fuese para olvidarme de ella (en The friends of Chili benefit, 9-5-1974). Caso distinto, es la siempre bien recibida When the ships comes in, que Dylan mima en el concierto y a la que introduce con una perorata de parábola bíblica: I wanna sing one song here recognising that there are Goliath's nowadays. An err people don't realise just who the Goliath's are but in older days Goliath was slayed and everybody looks back nowadays and sees how Goliath was. Nowadays there are crueler Goliath's who do crueler crueler things but one day they gonna be slain too, An people 2,000 years from now can look back an say remember when Goliath thesecond was slain.



Collage que sirvió de contraportada a un cd promocional del concierto
distribuido en Estdos Unidos donde se publicaron seis canciones.


A hard rain's a gonna fall no corresponde a los nuevos temas de Dylan, pero es una canción fresca del The Freewheelin' que Dylan incorpora inexorablemente al libreto de cada concierto. Genera respeto entre el público, atento mientras Dylan desgrana verso a verso una historia que para muchos significa un relato antibelicista, premonitorio de una tercera guerra mundial y un lamento descarnado de los pueblos más indefensos, siendo, en mi opinión, una suma de todo ello para anunciar que los tiempos que se avecinan traen vientos de cambio. Tampoco lo era de esta edición el tema Talkin' John Birch Paronoid blues, que ya fuera censurado en el mes de mayo en el Ed Sullivan Show, de la CBS, donde Dylan señala a la John Birch como una organización de extrema derecha, ni Who killed Davey Moore, la historia del boxeador que murió tras golpearse la nuca con las cuerdas del ring al ser derribado por KO técnico); las últimas dos canciones sí son decartes de The Times... La versión de Percy's song interpretada en el concierto es la más hermosa que le he escuchado (y toqué mi guitarra, toda la noche hasta el alba, vuélvete, vuélvete otra vez, y la única canción que lograba tocar era, ¡Oh la lluvia cruel y el viento!), mientras no encuentro explicación del por qué el productor Tom Wilson o el mismo Dylan dejaron como outtake la canción Seven curses, impresionante esta balada variante de las inglesas que narra la historia de el viejo Reilly (robó un garañón, pero lo atraparon y lo trajeron de vuelta, lo metieron en la cárcel, con una cadena al cuello... Caigan siete maldiciones sobre el juez tan cruel, que un médico no lo salve, que dos curanderos no lo curen, que tres ojos no lo vean, que cuatro oídos no lo oigan, que cinco muros no lo oculten, que seis sepultureros no lo entierren, y que siete muertes jamás lo maten). Así pues Carnegie Hall marcó un hito en la historia musical de Bob Dylan. A partir de entonces, y durante los tres frenéticos años siguientes, Dylan será un torrente de inspiración que definirá, indefectiblemente, el giro que adoptará la música pop y el rock.

1. The Times They Are A-Changin'
2. Ballad Of Hollis Brown
3. Who Killed Davey Moore?
4. Boots Of Spanish Leather
5. Talking John Birch Paranoid Blues
6. Lay Down Your Weary Tune
7. Blowin' In The Wind
8. Percy's Song
9. Seven Curses
10. Walls Of Red Wing
11. North Country Blues
12. A Hard Rain's A-Gonna Fall
13. Talking World War III Blues
14. Don't Think Twice, It's All Right
15. With God On Our Side
16. Only A Pawn In Their Game
17. Masters Of War
18. The Lonesome Death Of Hattie Carroll
19. When The Ship Comes In
North country blues, en el Carnegie Hall 2-10-63.

Read more...

Let me die in my footsteps. Finjan Club (Montreal), 2-7-1962

Let me die in my footsteps fue descartada de su inclusión en el álbum The Freewheelin' en 1963 en beneficio de Master of war y Talking World War III blues, las tres canciones versaban sobre la guerra y sus consecuencias, de ahí que, se especula, formaban un bloque exageradamente temático teniendo en cuenta además que A hard rain's a gonna fall, del mismo álbum, lanzaba un mensaje similar. La canción se grabó oficialmente el 25 de abril y sólo la he escuchado en directo en la cinta pirata del concierto que Dylan ofreció en el Finjan Club de Montreal la noche del 2 de julio de 1962, en una versión muy suelta pero sin la profundidad en la interpretación de la grabación de estudio, que es la más difundida y conocida por el público, sobre todo tras su publicación en el triple The Bootleg Series (1991). Existen además otras versiones de esta interesante (por su letra) y bella canción a lo largo de 1963, como la incluida en Witmark demo, la más lenta de todas e incompleta, acaba en la tercera estrofa, inmediatamente se escucha el comentario de Dylan: ¿Quieres ésta? ¿Quieres poner ésta? Es muy larga..., y la que se grabó para Broadside el 24 de enero, en la que Dylan toca la guitarra para acompañar una buena interpretación de Happy Traum. En síntesis, la canción es una preciosidad y da gusto escucharla una y otra vez. Su desconocimiento no le resta contemporaneidad, de hecho fue acertadamente versionada por el grupo Roma di Luna el 9 de agosto de 2008 en Minneapolis.


Dejadme morir de pie.

No acabaré bajo tierra
porque alguien me diga que la muerte se acerca
y no me dejaré morir sin más
cuando baje a mi tumba lo haré con la cabeza alta
dejadme morir de pie
antes de yacer bajo tierra

Ha habido guerras y voces de guerra
el sentido de la vida se ha perdido en el viento
y algunos piensan que el final está cerca
en lugar de aprender a vivir, aprenden a morir
dejadme morir de pie
antes de yacer bajo tierra

No sé si soy muy listo pero creo saber
cuándo intentan vendarme los ojos
y si llega esta guerra y hay muerte por todas partes
no quiero morir debajo sino encima de la tierra
dejadme morir de pie
antes de yacer bajo tierra

Siempre ha habido gente que propaga el miedo
lleva muchos años hablando sobre la guerra
he leído todas sus declaraciones y no he pronunciado palabra
pero ahora, dios mío, permite que mi pobre voz se oiga
dejadme morir de pie
antes de yacer bajo tierra

Si tuviera rubíes y riquezas y coronas
compraría el mundo entero para cambiar las cosas
arrojaría todas las pistolas y tanques al mar
porque son errores de una historia pasada
dejadme morir de pie
antes de yacer bajo tierra

Dejadme beber de las aguas que rebosan en los arroyos de la montaña
dejad que el perfume de las flores silvestres fluya a través de mi sangre
dejadme morir en vuestros prados sobre la verde hierba
dejadme caminar por la carretera en paz con mi hermano
dejadme morir de pie
antes de yacer bajo tierra

Salid a vuestro país donde la tierra se funde con el sol
contemplad los cráteres y los cañones donde caen las cascadas
Nevada, Nuevo México, Arizona, Idaho
dejad que cada estado de la Unión impregne vuestras almas
y moriréis de pie
antes de yacer bajo tierra.


Read more...
Este es un blog de información y divulgación de la música, la literatura y otras expresiones artísticas de Bob Dylan. Fue creado el 15 de enero de 2009, sin ánimo de lucro, con el fin de que la obra de este artista estadounidense sea conocida por las nuevas generaciones.

Contacta en FB y Twiter

Visitas al blog

Correo electrónico

Correo electrónico
lagranjademaggiebobdylan.hotmail.es

Vuestros comentarios

Dylanitas

Derechos de autor

Si queréis reproducir parte o la totalidad de algunas de las informaciones que contiene este blog podéis hacerlo sin necesidad de solicitar permiso, aunque no estaría mal que citáseis la procedencia. Las fotografías, pinturas, grabados, vídeos y letras de las canciones son propiedad de sus autores.

  ©Template by Dicas Blogger.